La eficiencia energética no puede esperar

El cambio a LED puede tener un gran impacto en materia de eficiencia energética por lo que es ahora el momento de actuar

Hoy en día, el mundo se enfrenta a lo que podría denominarse un trilema: la concurrencia de las crisis climática, energética y económica. Las economías están haciendo frente a numerosos aspectos derivados, las empresas se enfrentan al rápido aumento de los costes y a interrupciones en la cadena de suministro, y los consumidores se enfrentan a la inflación y a facturas de energía disparadas.

Aunque la intensidad de estas crisis varía en las distintas partes del mundo, el mundo entero se ve afectado, y hay que tomar medidas urgentes para contrarrestarlas. La demanda de energía sigue aumentando drásticamente y hay que actuar ya para poder hacer frente a sus efectos. En muchos países, la red está al límite de su capacidad o casi. En Europa, el 25 % de la electricidad se genera con gas. Esto refleja una situación precaria dadas las incertidumbres provocadas por las políticas y los conflictos que se viven en el este del continente.

Conclusión: el mundo necesita duplicar la velocidad de actuación en todos los ámbitos de la transición energética mundial para reducir el consumo y la dependencia de los combustibles fósiles. Entre otras cosas, esto significa duplicar la apuesta por los sistemas de eficiencia energética y los recambios, las fuentes de energía renovables y basadas en los recursos naturales, los vehículos eléctricos y los sistemas inteligentes capaces de producir más con menos.

Las iniciativas de eficiencia energética desempeñarán un papel decisivo tanto a corto como a largo plazo. A corto plazo, los recambios y los sistemas de eficientes energéticamente pueden ayudar a las administraciones, las empresas y los consumidores a reducir de forma rápida y eficaz el consumo energético. A largo plazo, estas iniciativas crearán la infraestructura conectada necesaria para alcanzar la ambición de cero emisiones netas.

Acelerar el cambio a LED inteligente puede impulsar los esfuerzos e impactos, duplicándolos. Signify ya ha hecho este llamamiento a la acción muchas veces, pero ahora necesitamos tomar medidas, y las necesitamos para ayer.

Acelerar el cambio a LED inteligente

La iluminación supone el 13 % de todo el consumo eléctrico mundial. Con el cambio a LED eficiente energéticamente, el consumo de energía relacionado con la iluminación podría reducirse al 8 % en todo el mundo antes de 2030, incluso aunque el número total de puntos de luz siga aumentando. Se trata de una intervención rápida y no disruptiva que puede servir de punto de partida para renovaciones más profundas y complejas. Dado que dos tercios de los puntos de luz profesionales de todo el mundo siguen siendo convencionales, el potencial de ahorro energético del cambio a LED resulta enorme.

La iluminación LED reduce significativamente el consumo energético con respecto a las alternativas convencionales: más de un 50 % en la mayoría de los casos. Cuando se conectan, gestionan, supervisan y controlan adecuadamente, los sistemas de iluminación LED inteligente pueden reducir el consumo energético hasta un 80 %, con resultados sorprendentes. Además de mejorar su eficiencia, la conexión de la iluminación LED a una red y la integración de sensores y controles sientan las bases de marcos digitales de edificios y ciudades inteligentes que reúnen múltiples funciones y aplicaciones.

Si las empresas y las ciudades cambiaran todos sus puntos de luz convencionales por LED o LED inteligentes, el ahorro mundial de electricidad podría ascender a 1132 TWh al año, lo que equivale al consumo eléctrico anual de 494 millones de hogares. Este cambio a LED supondría un ahorro total de 177.000 millones de euros al año en costes de electricidad, al tiempo que se evitaría la emisión a la atmósfera de más de 553 millones de toneladas de CO₂. Eso equivale a la cantidad de carbono que podrían absorber unos 25.000 millones de árboles en un año.

Los resultados pueden resultar significativos incluso a escala local. En una ciudad europea de 200.000 habitantes, por ejemplo, el cambio a LED de toda la iluminación convencional podría ahorrar más de 78.000 MWh, más de 26 millones de euros y más de 18.000 tCO₂ al año.

Incentivar al consumidor para hacer el cambio a LED

Los particulares también tienen un papel importante que desempeñar. Hay muchos puntos de luz residenciales y el cambio a LED puede tener un impacto significativo en el consumo eléctrico y en las emisiones de carbono.

Es esperanzador que muchos consumidores ya hayan empezado a hacer el cambio a LED: el 55 % de la iluminación residencial ya funciona con LED. En este sentido, solo en la UE, el cambio del 45 % restante podría suponer un ahorro de más de 34 TWh anuales: el consumo anual de 9,4 millones de hogares o la electricidad necesaria para cargar más de 10 millones de vehículos eléctricos. El ahorro anual podría superar los 11.000 millones de euros.

Cambiar solo siete puntos de luz residenciales a LED supondría un ahorro energético y de coste equivalente a la disminución de la temperatura en interiores en 2 °C durante la temporada más fría del año. Por supuesto, los residentes podrían hacer ambas cosas y duplicar el ahorro sin renunciar al confort adicional ni comprometer la calidad de vida.

Mantener las luces encendidas es crucial

Algunos han sugerido que la forma más conveniente de mejorar la eficiencia energética es apagar las luces por completo. Este es un buen ejemplo de una supuesta solución que es peor que el problema que busca resolver.

La luz es uno de los elementos esenciales para la vida de las personas, junto con la comida, el agua, el aire y tener una vivienda. La luz proporciona seguridad, comodidad, felicidad y bienestar. De hecho, los estudios han demostrado que una iluminación nocturna adecuada puede hacer bajar los índices de delincuencia en un 21 % y reducir los accidentes de tráfico en un 30 %. Las escuelas necesitan luz para que los alumnos puedan aprender. Los hospitales necesitan luz para los tratamientos y la recuperación. Los edificios públicos y comerciales necesitan luz para que las personas puedan realizar su trabajo de forma adecuada y productiva. Los hogares necesitan luz para que las personas puedan estar juntas, relajarse y disfrutar en un entorno confortable.

Prescindir de la luz no es una respuesta. La iluminación LED eficiente energéticamente, correctamente gestionada y suministrada en el momento y la forma adecuados, sí lo es.

El cambio a LED con los controles adecuados puede maximizar el potencial de ahorro de energía de la luz con programas de regulación y programaciones que proporcionan luz cuando y donde se necesita, y no cuando no es necesaria.

Esto es importante, pero solo es el principio. Signify lleva décadas trabajando en la comprensión de la iluminación para ayudar a mejorar la salud y el bienestar de las personas mediante el aprovechamiento de los beneficios visuales, biológicos y emocionales de la luz. Hemos desarrollado ópticas y recetas de luz diseñadas para ayudar a las personas a ver, sentir y trabajar mejor.

No te puedes permitir no hacer el cambio a LED y actuar ahora

Cambiar por completo la iluminación convencional por LED y LED inteligente puede imponer, pero ten en cuenta que si no actúas de inmediato, pagarás por duplicado: ahora, cuando pagues los elevados precios de la energía de la iluminación convencional ineficiente, y otra más adelante, cuando tengas que sustituir la iluminación.

Acelerar el cambio a LED inteligentes eficientes energéticamente es un paso sencillo pero importante que te puede ayudar a reducir el consumo energético y a cumplir los objetivos de acción climática en cualquier parte del mundo.

En Signify, hemos situado la sostenibilidad en el centro de nuestra estrategia empresarial. Logramos la neutralidad de carbono en el conjunto de todas nuestras operaciones a nivel global en septiembre de 2020 y seguimos superando muchos de los demás compromisos de sostenibilidad que nos hemos marcado. Con programas como el Green Switch en Europa y Brighten America en los EE. UU., estamos compartiendo nuestra experiencia y conocimientos para ayudar a los demás a que también cumplan sus compromisos.

Como líder mundial en iluminación, nuestro papel no es solo operar de forma responsable, sino ayudar a ciudades, empresas y particulares a hacer frente a las actuales crisis energética y económica y, al mismo tiempo, contribuir evitar los peores efectos del cambio climático.

La eficiencia energética es clave para contribuir a hacer frente al cambio climático. Pero el momento de hacerlo es ahora. No te puedes permitir no hacerlo, ni por la economía, ni por el clima, ni por las personas que dependen de ti.